¿Y la Sub 20 ‘apá?

El mundial juvenil efectuado en Colombia lleva ya dos jornadas futboleras que han pasado prácticamente inadvertidas para el aficionado mexicano.

Después de vivir un verano lleno de futbol, el “broche de oro” de este buffet futbolero no ha acaparado reflectores, ni llamado la atención como los otros torneos que se vivieron.

Iniciamos con la Copa Oro, que con el simple hecho de ver a la Selección Mayor, ya tenía a más de uno pegado al televisor.

Sumémosle el hecho de la Chicharomanía, el morbo por ver el nivel de los jugadores que necesitaban agarrar equipo en Europa y que el quedar campeones, frente a nuestro archirrival Estados Unidos, nos daría un boleto para participar en la Copa Confederaciones; cosa que se logró.

Continuamos con el mundial sub 17, que a pesar del anonimato de los jugadores, acaparó la atención de todo el pueblo mexicano, que volvía a vivir un evento de talla internacional en el balompié.

Los estadios se llenaron y se volcaron frente a unos niños que lograron alzar la copa, como lo hicieron algunos otros seis años atrás en Perú; fue así como se volvió a ser campeón mundial en esta categoría y estos niños se ganaron el cariño de todos los mexicanos.

Al mismo tiempo que en nuestra tierra vivíamos esta fiesta mexicana, nuestras compatriotas futboleras peleaban en Alemania por un boleto en el mundial femenil; cosa que no lograron, pero el hecho de que en México estuviéramos respirando tan de cerca el futbol, nos hizo ponerles atención a nuestras embajadoras en Europa.

Siguió la Copa América, y las grandes potencias sudamericanas tenían que ser las protagonistas, por lo que más de medio mundo volteó a ver los partidos que se llevaban a cabo en el cono sur del continente americano.

Con grandes decepciones de Argentina y Brasil, fue como Uruguay se alzó con el triunfo y se proclamo campeón de la Conmebol; con todo y las sorpresas de Perú y Venezuela; frente a un Paraguay rey del empate y rey de los penales. (Del Tri en este torneo mejor ni hablamos)

Fue demasiado el futbol a nivel de selección, que ya contábamos los minutos para que llegara nuestro tradicional y tan querido futbol mexicano.

La expectativa estaba al borde para el inicio de la jornada 1, que arrancó casi en sincronía con el mundial sub 20 en Colombia.

Apoyando al equipo de sus amores, al aficionado mexicano, se le olvida que en tierras cafetaleras hay unos muchachitos con algunos minutos en primera división tratando de levantar el orgullo mexicano.

Perdieron frente a Argentina, pero le ganaron el duelo a los norcoreanos y pelearan por el boleto a la siguiente ronda frente a unos ingleses que no han ganado en el certamen.

¡Ánimo!